sábado, 9 de septiembre de 2017


VIDA ( por Mary Doval)

Cerró sus ojos para evadirse del mundo, y los abrió en su imaginación, dejando volar sus deseos lejos, muy lejos fuera de la realidad, e imaginó mariposas aleteando en sus pestañas, prados verdes llenos de amapolas y niños jugando felices, cuanto más soñaba más difícil le era volver a su realidad. Decidió entonces no volver a abrir sus ojos hasta que su corazón dejase de estar lleno de dolor y tristeza, de repente sintió  el tacto de una mano cálida que le acariciaba en la mejilla y  alguien la besaba suavemente, era su hija pequeña,  y despertó. Siempre hay un oasis donde refugiarse en medio de la tempestad se dijo a si misma. 
MJ


jueves, 7 de septiembre de 2017


UNA TARDE DE OTOÑO ( por Mary Doval)

Y cuando la lluvia rozó sus mejillas y empezó a deslizarse sobre su rostro se trasladó a la niñez, a aquellas tardes de otoño en el parque con sus amigos, cuando solo importaba ser feliz y nada oscurecia su sonrisa, y volvió a sonreir, de repente ya no era una sonrisa sino una carcajada sonora, que hizo que su cuerpo frágil y consumido despertase,  quisiese una segunda oportunidad de liberarse, de volver a vivir, tenía derecho a disfrutar y aquella carcajada había despertado otra vez su pasión por la vida.